Ante la violencia y crisis de valores, “se deben promover el respeto a la vida, el amor, la paz y la justicia”
* “La gente no vive en museos, sino en la realidad social”
* No hay que destruir, sino valorar lo humano
Gabriel Valencia Juárez
Guachochi, Chih.- Ante la crisis de valores humanos y violencia viviente en México, se deben promover la cultura del respeto a la vida, el amor, la paz y la justicia “para crear una sociedad mejor; donde no se destruya, sino se valoren los derechos espirituales y materiales de los seres humanos, como ordenan los mandamientos de Dios”, afirmó el Nuncio apostólico en México, monseñor Cristopher Pierre, en su primera visita a la Sierra Tarahumara de Chihuahua, quien fue recibido con gran entusiasmo por la comunidad católica y autoridades eclesiásticas, municipales y estatales.
Considerado como una “bendición de Dios” su peregrinación por “estas tierras tan pobres económicamente, muchas veces olvidada, pero tan querida, rica en cultura y fe”, como coincidieron el obispo de la Tarahumara, Rafael Sandoval y el alcalde de Guachochi, Andrés Balleza, el embajador del Vaticano, arribo a las 10: 05 a.m., al aeropuerto local, donde desde temprana hora, se congregó la comunidad católica.
Tras el recibimiento efusivo por el presidente municipal de Guachochi, del vocal de la Coordinadora Estatal de la Tarahumara, Jesús Velásquez Rodríguez, en representación del gobernador del Estado, Cesar Duarte, y del párroco de Guachochi, Juan Manuel Morán Pedroza, se efectuó en el hangar del aeropuerto, una reunión de presentación del nuncio apostólico ante decenas de católicos provenientes de diversas colonias y comunidades de Guachochi.
En su mensaje, Cristopher Pierre, de origen francés quien lleva 4 años en México, tras manifestar su inmensa alegría por el recibimiento preparado por las diversas autoridades, dijo sentirse “mexicano por el Himno y la Bandera nacional” que se exhibieron y cantaron en el acto oficial y solemne.
El diplomático católico de Roma manifestó que en “Semana Santa se da el paso de Dios entre nosotros; para vivir el pasaje de Cristo; para acercarnos a Dios y retomar la conciencia espiritual; para no olvidar nuestra verdadera identidad, y no alejarnos de Dios y de la humanidad”.
Al pronunciarse por “una sociedad mejor”, de acuerdo a los mandamientos de Dios, monseñor Cristopher Pierre, apuntó que se engloba en todas las dimensiones y actividades
de los seres humanos: desde la familia, el trabajo, lo espiritual, lo material y lo económico. Hizo referencia de que “no solo de pan vive el hombre, sino también espiritualmente”, ya que “el arte de gobernar es respetar” a los semejantes.
Ante la violencia, promover la cultura del amor y la paz; no la guerra
Respeto a la violencia y crisis que viven México, el representante del Papa Benedicto XVI, señaló que donde hay violencia, “la iglesia vive la realidad; vive la situación de sufrimiento”, por ello subrayó, se deben promover la cultura del amor, la paz y la justicia.
Monseñor Pierre se pronuncio contra la cultura de la violencia y la guerra, y resalto el respeto a la vida y a los valores humanos que viven todas las familias; para ello, agregó, la iglesia debe estar más cerca de la gente, sino “no seremos capaces de imponer los valores cristianos”, toda vez, que la “gente no vive en museos, sino en su realidad, en sus valores cotidianos”, acotó.
A su vez el alcalde de Guachochi, Andrés Balleza, externó que la presencia del representante Papal, en la Sierra Tarahumara, “es una bendición”. Dijo que su fe cristiana lo acompaña ante los diversos problemas, de crisis, y que el gobierno municipal, trabaja con humildad y fervorosamente por el bien de sus habitantes.
En la iglesia de los indígenas.
A las 11: 50 a.m., llegó la columna de católicos encabezados por monseñor Cristopher Pierre, autoridades municipales y estatales. Al frente de ellos, un estandarte de la Virgen de Guadalupe, era cargado por unas jóvenes rarámuris, luego de caminar del aeropuerto a la iglesia de los rarámuris, donde fueron recibidos por autoridades y un grupo de mujeres indígenas que danzaban. “Los ritos y danzas son para dar un ejemplo de la cultura y costumbres de los indígenas al representante del Papa”, indicó el gobernador rarámuri de Guachochi, Rafael Aguirre Amaya, quien preciso que la visita del Nuncio apostólico “es un orgullo para los rarámuris”.
En el saludo a la Cruz en la iglesia de los Tarahumaras, donde dieron tres vueltas alrededor de la cruz, seguidos de incienso, como es el ritual rarámuri, monseñor Pierre, dijo, bajo un sol radiante: “Dios está con nosotros, somos su obra y Cristo vino a mostrarnos el camino hacia Dios”.
En este sentido, el obispo de la Tarahumara, Rafael Sandoval, dijo en referencia al embajador del Vaticano, tanto en rarámuri como en español, “que es Jesucristo que viene a visitarnos, y el Papa Benedicto XVI, lo envió a cuidar a mis chivitos o borreguitos”. “Dios-Onoruami hizo la tierra, y cuando la humanidad anda mal, decidió salvarnos”, concluyó el obispo de la Tarahumara, quien acompañó al Nuncio apostólico de Chihuahua a Guachochi en avión.
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